Se aproxima la época en la que se celebran las primeras comuniones, y me ha parecido oportuno realizar unas galletas que conmemoren este día tan importante para los niños.
No os voy a negar que han sido varias las amigas que me han propuesto que lo hiciera, vamos que me han empujado a ello, pero desde luego lo hago con gusto y me parece una idea muy acertada por su parte (las amigas siempre apoyándome).
Si algo tenía claro, es que quería que fueran algo muy especial, como lo requiere el paso tan importante que dan los niños esa fecha. Pero además, estaba especialmente comprometida con que no fuera nada vulgar, carente de simbolismo y sobre todo que quedaran unas galletas finas y originales.
Yo, que ya tengo ciertos años, en concreto cuarenta y seis, cuando pienso en los recordatorios que dábamos a familiares y amigos que acudían a nuestra comunión, los guardo en mi memoria, con motivos muy sencillos llenos de simbolismo: el cáliz, el pan, las uvas, la paloma, la cruz, el cordero pascual etc. etc. ... Pues bien, eso es lo que yo he querido plasmar en mis galletas.
Pero también hay que dar cabida a los protagonistas del día, los niños, como Daniela un encanto de niña, que el 10 de Mayo hará su Primera Comunión y para la que he diseñado, una galleta, a partir de una foto del vestido que llevará ese día y que su madre me ha hecho llegar. La deseo de todo corazón un día muy feliz que guarde en su memoria con mucho cariño y si yo puedo contribuir modestamente a ello, pues mucho mejor... ¡me llena de satisfacción!
A continuación os muestro todos los modelos que he realizado con motivo de esta fecha tan importante. Espero que os guste, llevan muchísimo trabajo, sobre todo porque todos los adornos son diminutos. Los dorados y plateados, están elaborados con pintura comestible sobre piezas realizadas previamente y colocadas sobre la galleta de mantequilla.
