Cuánto tiempo sin dedicaros un ratito... esta vez no voy a poneros escusas, ¡¡¡que debéis de estar hartos!!! En fin vuelvo a retomar mi actividad bloguera presentando una de mis debilidades, "La Tarta de Zelda para Pepe".
Si tuviéramos que buscar en el mundo al mayor fan de Zelda, yo creo que habría unanimidad a la hora de conceder ese premio a mi amigo Pepe. Era fácil decidir el motivo para su tarta de cumpleaños, tenía que ser algo relacionado con este mundillo. Ya sabéis que según el postre que tengas que realizar, así te toca buscar información, pues bien yo ni idea de lo que era Zelda (imagino que como muchos de vosotros), pero tocaba aprender... Vamos con unas breves nociones: juego de Nintendo, cuyo protagonista es Link que tiene como uno de sus elementos característicos su escudo, cuya misión es salvar a una princesa que se llama Zelda (reencarnación de la diosa Hylia).
Después del aprendizaje, vino la elección del motivo de la tarta. Me pareció que el escudo podía quedar muy vistoso, puesto que tiene elementos muy lucidos: la Trifuerza y el Ave Roja.
Las dimensiones de esta tarta eran espectaculares, la realice sobre un bizcocho de 40cm de largo por 25 de ancho, es el molde rectangular más grande que cabe en un horno doméstico.
TRIFUERZA
Lo primero era dibujar sobre papel de horno la forma del escudo y todos sus elementos. A continuación recorté el bizcocho con la forma deseada e hice el tratamiento propio de una tarta: partir, almibarar, rellenar y sellar con crema de mantequilla. Después de estos pasos, que se escriben muy deprisa pero que requieren de mucho tiempo, refrigeré la tarta. Además, era verano, con lo cual convenía tener muy asentada la crema de mantequilla para poder colocar con mayor facilidad el fondant. Decir que como la representación de jóvenes y niños era mayoría, opté por el imperio del chocolate: Bizcocho de chocolate y relleno de crema al cacao.
AVE ROJA
Teñí el fondant con los colores necesarios: amarillo Primrose de Sugarfair para la Trifuerza, Red Extra de sugarfair para el Ave Roja, Blue de la marca Squires Kitchen para el fondo del escudo y finalmente con un poquito de negro hice el gris sobre el que luego pintaría con Metallic Light Silver de Rainbow Dust. Sobre este último aspecto hay opiniones: unos prefieren los colorantes metálicos en spray, y otros en cambio preferimos los líquidos o reconstituir colorante en polvo con un poquito de alcohol alimentario (que luego se evapora).
